7. Crucero a Glaciares Upsala y Onelli

Despierta otro bonita mañana en El Calafate. Somos afortunados con el tiempo. Como cada mañana desayuno dulce de leche con pan. Mi barriga crece y mi vesicula (o el hueco que hay) no se resienten.

El dia anterior, tuvimos que tomar la decision no ir a Chile a intentar ver las Torres del Paine, ya que para un dia parece que no vale la pena, es un camino complicado, y si esta nublado, lo haces para nada... ademas necesitamos cambiar a Pesos Chilenos... y esa noche nos es imposible, un rollo, lo de ir al dia tiene sus ventajas y sus inconvenientes...

Salimos en un bus hacia los glaciares y en 1h llegamos a nuestro catamaran, la Chonek
(como la chony...) Nuestro bus es el más lento y llegamos los ultimos, asi que no nos toca ventana... no nos importa ya que pensamos pasar todo el dia en el exterior del barco, para ello llevamos nuestros nuevos superpantalones de treking (que a estas alturas ya se tienen solos), que no nos los hemos quitado desde que llegamos a Argentina, combinados con unas mallas debajo; ademas, como son iguales vamos superconjuntados, parecemos el duo dinamico.



A los pocos minutos de navegacion comenzamos a ver tempanos de hielo (si, si, como en titanic) , cada vez mas grandes. No hace un frio excesivo y de vez en cuando sale el sol. La navegacion por el lago es espectacular. El color del agua es grisacea por los sedimentos que arrastra el hielo.

Algunos pibes van con vaqueros, que locos!! Nosotros supercalentitos con doble capa. La visita dura todo el dia observando el glaciar spegazzini y Upsala,el mas impresionante, algo mas grande que el moreno pero solo divisable desde el barco.

El barco continua por el brazo del lago esquivando tempanos gigantescos (ver fotos,aunque no sabemos si se aprecia el tamaño), formados ellos por hielos milenarios, algunos de ellos completamente azules, al estar mas compactados. Impresionante e imperdible.

Como cultura general contaros que los glaciares se forman por agua de lluvia y nieve a lo largo de miles de años. Las perturbaciones llegan a Argentia desde el pacifico dejando todas sus precipitaciones a lo largo de los Andes y quedando completamente secas al Este de estos. Prueba de ello es que el Calafate, a solo 50 km de los Andes resulta ser lo mas parecido a un pueblo de los monegros ,menos mal que tiene el lago.... Otra peculiaridad de estos glaciares a diferencia de los alpinos, es que esan casi al nivel del mar, por lo que el tiempo es algo mas suave.

Tras contemplar la majestuosidad de los glaciares, nos dirigimos a almorzar a la bahia Onelli. Esta vez llevamos comida... Es un embarcadero al lado de un bosque desde donde comenzamos a caminar hacia el interior en pocos minutos, caminando entre sombras divisamos un lago turquesa con un glaciar al fondo y todo cubierto de tempanos, las vistas son relindas. Es un sitio ideal para comer y en el que el que te puedes olvidar de todo. Una gran sorpresa en el viaje, y que no esperabamos.

Seguimos haciendo fotos y caminando por la playa de piedras que rodea la laguna. Llega la hora de regresar y dejamos ese idilico lugar mientras nos sobrevuelan unos condores mirando quizas a ver si el barco se deja algun pasajero.

Regresamos a el Calafate y cenamos algo ya que al dia siguiente saldremos hacia el chalten, a ver si hay suerte y vemos el Fitz Roy.